CONCLUSIÓN

CONCLUSIÓN

Al culminar el curso de Aritmética: Números Naturales pude corroborar infinidad de hipótesis acerca de las matemáticas, una de ellas, es el hecho de que es algo que utilizamos en la vida diaria ya que inconscientemente usamos el conteo ya sea para sumar, restar, repartir o multiplicar cosas, animales, frutas, dulces, etc.

El desarrollo del pensamiento matemático inicia desde temprana edad y su finalidad es que los niños usen los principios del conteo; reconozcan la importancia y utilidad de los niños en la vida cotidiana, y se inicien en la resolución de problemas y en la aplicación de estrategias que impliquen agregar, reunir, quitar, igualar y comparar colecciones.

Este curso me ayudo mucho profesionalmente. Un punto clave aquí fue el  entender que la enseñanza de las matemáticas en la educación primaria es primordial, es una herramienta básica para la vida cotidiana, ¿Por qué hago mención en la vida cotidiana? Es fácil, ya que cualquier niño o adulto utiliza las matemáticas en su día a día. Desde temprana edad los niños empiezan a utilizar el conteo, la suma, resta, división o multiplicación.

Puedo decir que el trabajo del docente, lamentablemente, se encuentra muy sobrevalorado en pleno 2020, pero lo más inquietante de esto, es que las personas no terminan de entender lo que conlleva ser maestro. Ya que uno de los principales propósitos, es el de brindarle al niño la oportunidad de que desarrolle las primeras bases del conocimiento, para que así, pueda seguir con su educación, acompañado de las herramientas básicas.

Un claro ejemplo de las matemáticas en el día a día es cuando un niño fácilmente puede reconocer cuando su padre o madre le da más dulces a su hermano, y no le da la misma porción a él, el niño comienza a analizar estos problemas que fácilmente se le pueden presentar, sin imaginar por un momento que está haciendo matemáticas y muchas de las veces lo logra entender  cuando se le enseña el propio concepto de los números.

Me gustan mucho las matemáticas, y quiero ser de los maestros que le dejen algo al alumno, el profesor Juan Carlos Ochoa formo una parte fundamental aquí ya que repercutió mucho a mi aprendizaje y me atrevo a decir que él es uno de esos maestros que dejan algo a sus alumnos.

Algo que me encanto en este curso, fue el enfrentarme a nuevos retos, ya que abordamos temas básicos para un niño de primaria, pero no fue tan fácil, ya que tuve que conocer y trabajar con diferentes mecanismos, me refiero a el tipo de conteo y escritura de los Lalilaneses, esto me ayudo a ponerme en el lugar del niño y enfrentar los mismos problemas al que ellos se enfrentan, también otra dificultad a la que me encontré fue la utilización de las fichas (azules, rojas, amarillas o verdes) en la resolución de los problemas ya que fue un procedimiento que desconocía, pero que realmente me fascinó conocer una vez dominado el tema y que fueron de mucha ayuda a la hora de la realización de algún problema.

Otro punto que quiero destacar, es el que me agrado mucho la idea de conocer el sistema de numeración en muchas de sus formas base, ya sea en base 3, 4, 5, 6, en realidad, se puede trabajar en muchas, solo es cuestión de querer intentarlo. Esto me ayudo a  desarrollar habilidades a la hora de trabajar con ellas, salí de mi zona de confort ya que estaba acostumbrada a el sistema de numeración en su base decimal.

Realmente esto me hizo abrir los ojos y darme cuenta que tenemos que ponernos al nivel del niño y saber sus necesidades o dificultades a la hora de ver temas como los abordados a lo lardo de las cuatro unidades de aprendizaje.

Me atrevo a decir que me llevo muy buenos conocimientos sobre lo visto a lo largo del primer semestre y, sin duda, son conocimientos y técnicas que implementare a la hora de estar frente a un grupo.